La base de la higiene personal
¿Qué es el jabón y para q sirve? Es un producto de higiene personal sólido o líquido que se utiliza para limpiar la piel del cuerpo. Está compuesto por una mezcla de ácidos grasos y bases alcalinas, que al entrar en contacto con el agua, generan una reacción química que permite eliminar la suciedad, las bacterias y las grasas de la piel.
¿Para qué sirve?
Su función principal es la limpieza de la piel. El jabón elimina la suciedad, las bacterias y las grasas que se acumulan en la piel a lo largo del día, previniendo así la aparición de infecciones, acné y otros problemas cutáneos. Además, el jabón de manos también puede ayudar a:
- Eliminar el mal olor corporal.
- Regular la producción de sebo.
- Mantener la piel hidratada.
- Suavizar la piel.
- Proteger la piel de las agresiones externas.
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Beneficios de usar jabón:
- Limpieza profunda: Elimina la suciedad, las bacterias y las grasas de la piel de forma eficaz. Es un producto de lo más completo.
- Protección contra las infecciones: Ayuda a prevenir la aparición de infecciones cutáneas. La salud y la higiene siempre van de la mano, no lo olvides nunca.
- Mejora la salud de la piel: Ayuda a mantener la piel sana y libre de imperfecciones.
- Frescor y vitalidad: El jabón deja la piel con una agradable sensación de frescor y vitalidad. Y eso es algo de agradecer, ¿no crees?
- Sensación de bienestar: Su uso regular nos proporciona una sensación de bienestar y limpieza, que te puede durar durante horas y horas.
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¿Cómo usarlo correctamente?
- Humedece la piel con agua tibia. No escatimes agua, pero no derroches.
- Aplícalo en la piel y frótalo hasta crear espuma. Cuanto más lo frotes, más espuma conseguirás. Y eso es muy bueno.
- Presta especial atención a las zonas más propensas a la suciedad y las bacterias, como las manos, las axilas y los pies. No tengas prisa en tu aseo, mejor hacerlo bien que con prisas.
- Enjuaga bien con agua tibia. De nuevo, no escatimes en agua, pero tampoco derroches.
- Seca la piel con una toalla suave. Y ya está, no hay más misterio.
Elige el adecuado para tu tipo de piel
En el mercado existen una gran variedad de jabones, por lo que es importante elegir el que mejor se adapte a tu tipo de piel y a tus necesidades.
- Piel seca: Busca un jabón hidratante y nutritivo.
- Piel grasa: Elige un jabón regulador de la grasa.
- Piel sensible: Opta por un jabón suave y sin fragancias.
- Piel normal: Puedes utilizar cualquier tipo de jabón.